Antes de empezar a darle forma al proyecto se deben realizar una serie de trabajos que son necesarios para salvaguardar el resto de la vivienda del polvo y suciedad generados en las zonas a reformar. Esto cobra especial importancia cuando se trata de una reforma parcial y vas a convivir durante algunas semanas con albañiles, fontaneros, electricistas, carpinteros y pintores. En el mejor de los casos dispondrás de otra vivienda donde pasar tranquilamente el tiempo de tu reforma.
Se deben proteger las carpinterías, los suelos, las paredes y todos aquellos elementos de la casa en donde se vaya a producir especial tránsito. En edificios de viviendas debido a los trasiegos de materiales, elementos auxiliares, escombros y un largo etcétera incluso se deben proteger los elementos sensibles de las zonas comunes.
De este modo se minimiza en mucho la aprensión a los trabajos que se van a realizar en casa y al finalizar la misma todo seguirá en el estado que estaba inicialmente.